El dólar y las principales monedas en 2026
El año 2025 estuvo marcado por la volatilidad política y las decisiones de la Reserva Federal, pero el banco holandés ING anticipa un cambio de tendencia en el mercado cambiario global para el próximo año. Según sus estrategas, se espera un dólar más débil, un euro sostenido y un mayor protagonismo de las monedas asiáticas.
Dólar: perspectivas para 2026
El dólar experimentó episodios de inestabilidad en 2025 debido a diversos factores, como el aumento del gasto fiscal en Alemania, la ofensiva arancelaria de Trump y las tensiones con China. Sin embargo, para 2026 se espera que la volatilidad disminuya y que el dólar tenga dificultades para recuperarse, incluso podría depreciarse aún más.
Se estima que para marzo de 2026, la Fed habrá completado su ciclo de recortes de tasas, lo que limitaría el margen de fortalecimiento del dólar. Además, la reducción de tasas disminuiría el costo de cobertura cambiaria, lo que presionaría a la baja a la divisa. También existen riesgos internos, como la sostenibilidad de la deuda estadounidense y la prima de riesgo política de cara a las elecciones legislativas de noviembre de 2026.
Euro y libra esterlina
Para el euro, se espera que mantenga su fortaleza en 2026, respaldado por un crecimiento proyectado para la eurozona. Sin embargo, el principal riesgo sigue siendo la incertidumbre política en Francia. En cuanto a la libra esterlina, aunque ofrece un retorno atractivo, las perspectivas de crecimiento moderadas y las posibles tensiones fiscales en el Reino Unido la hacen vulnerable.
Monedas asiáticas y otras divisas
En el caso del yuan chino, se proyecta estabilidad dentro de un rango específico en 2026, gracias a la capacidad demostrada por el Banco Popular de China para sostener la moneda. Se espera un mayor interés por las divisas asiáticas, como la rupia india, si se alivian las tensiones comerciales con Estados Unidos.
Además, ING también destaca el desempeño positivo esperado para la corona sueca y el dólar australiano en 2026. En contraste, el dólar canadiense se vislumbra como una de las divisas más frágiles debido a problemas comerciales y la posibilidad de una mayor flexibilización monetaria por parte del banco central.
En resumen, el panorama para el mercado cambiario en 2026 apunta a un dólar más débil, un euro sostenido y un mayor protagonismo de las monedas asiáticas, según las proyecciones del banco holandés ING.
